Aquí os dejo un tema escrito por el amigo Rafa Martínez Reiné en Facebook, que compartimos literalmente de cabo a rabo. Enhorabuena Rafa, somos muchos los que pensamos igual.
No hace mucho una persona, a la que no viene a cuento nombrar porque no tiene importancia, me vio por la calle y estuvimos saludándonos como dos personas que se aprecian y hace mucho que no se ven.
Tras los abrazos, apretones de manos, los cómo andas y dónde estás este año me hizo una pregunta, que si soy sincero, tenía ganas que alguien me la hiciera. “No hay quién te vea por el artificial, estás enfadao con alguien o qué?”. La respuesta que le di fue la siguiente: “problemas? Ninguno. Después de haber pasado por los dos clubes del pueblo, donde he pasado unos años inolvidables, la verdad que no me apetece acercarme por allí. Cualquier otra cosa me parece mejor que ver un partido de niños o chavales”.
La respuesta lo dejó, aprovechando la temática, en fuera de juego y por eso me volvió a preguntar: “Y eso? Con lo que te gusta a ti el fútbol de críos…”. Y ya pues le tuve que terminar de dar las razones. “El fútbol base ya no es lo que era en este pueblo. Antes los niños jugaban a ser los Zidanes, Ronaldinhos, Raúles o Rivaldos y ahora son los entrenadores los que juegan a ser los Simeones, Guardiolas o Mourinhos”. Se quedó este hombre un rato callado y cuando maduró la respuesta me dice “po es verdad”. Si no cambiamos por desgracia lo de hoy seguirá pasando.
Señores los protagonistas son los niños y hay que enseñarles a que el pueblo es muy chico y que hoy estás frente a mi y eres mi rival, pero mañana puede que estés junto a mi y seas mi compañero. Rivales y amigos. Compañeros y hermanos.
Con esto no quiero crear polémica. Si alguien se siente ofendido le pido mil disculpas. Es una visión generalizada y ya se que no todos son iguales. Lo único que quiero es que hechos como el de hoy, que por suerte no lo he vivido, no vuelvan a producirse por el bien de mi pueblo y por el bien de esos dos grandes clubes que me han dado lo mejor a nivel deportivo y personal.
Y por supuesto muy contento de que los dos equipos del pueblo hayan ascendido, pero me hubiese gustado más que al acabar los dos juntos lo hubiesen festejado como rivales, amigos, compañeros y hermanos.
