Es el único que se organiza “sin sangre”, ya que el señuelo es mecánico. Asimismo, todas las pruebas y exhibiciones se realizan en recintos al aire libre y con acceso gratuito.
La ciudad de Isla Cristina vuelve a acoger el “X Encuentro Nacional de Cetrería y Conservación de Aves de Presa” (ENCCAP 2016) que organiza el isleño Francisco Miguel Silva Cazorla, en estrecha colaboración con la Delegación Municipal de Medio Ambiente.
El lugar para presentar el encuentro, de carácter nacional e internacional, no ha podido ser más apropiado, la sede del Departamento de Medio Ambiente, “La Casita Azul”, situada en pleno paraje natural de Isla Cristina y conducido por el Técnico Municipal del área, Manuel Angulo, quien comenzó su intervención disculpando la ausencia de la Teniente de Alcalde y Delegada del ramo, Montserrat Márquez, “por encontrarse convaleciente de una intervención quirúrgica sin mayor trascendencia”.
Angulo comenzó dando la bienvenida al organizador y le agradeció que “hayas vuelto a elegirnos para celebrar otro de los encuentros cetreros, y van diez ediciones, haciéndose un gran esfuerzo por parte del ayuntamiento para que se pueda seguir celebrándose y a coste cero para las arcas municipales”.
Por su parte, Francis Silva inició su intervención agradeciéndole a la responsable de Medio Ambiente, Montserrat Márquez, “su implicación, dedicación y preocupación personal porque el encuentro volviera a tener como sede Isla Cristina, mi pueblo”. Silva anunció que “este va a ser un magnífico año, ya que nada más abrir el plazo de inscripciones se lleno por completo” y, por lo tanto, alrededor de medio centenar de aves participarán, tanto en las exhibiciones, como en las diferentes pruebas previstas.
Los participantes llegaran desde todos los puntos del país y comunidades autónomas, así como desde Portugal para, como recordó el organizador, “participar en el Campeonato Andaluz de Bajo Vuelo con señuelo Mecánico, el único que se celebra sin presa real y por lo tanto, no hay derramamiento de sangre”.
Para la concejala, Montserrat Márquez, que aunque no asistió a la presentación, si hizo declaraciones posteriormente, “es muy importante que, eventos como este sigan realizándose en Isla Cristina, un encuentro más que consolidado, único a nivel nacional, que este año cumple su décima edición”. Asimismo, Márquez dio que “en estos días, Isla Cristina se convierte en el punto de referencia a nivel nacional en el mundo de la cetrería y de la conservación de aves de presa, con la importancia que a nivel económico y de promoción turística, conlleva para nuestro pueblo, y esto es posible gracias al trabajo del isleño Francisco Silva, organizador del evento y un apasionado de este mundo.”
Márquez quiso agradecer también la participación de cetreros locales y foráneos así como la colaboración de los patrocinadores del evento “que hacen posible que este fin de semana podamos disfrutar del arte de la cetrería. Veremos aves como halcones, águilas, harris y otras volando en libertad, y aprenderemos de la simbiosis ave-humano”. Por último indicó que “siempre contarán con la ayuda del ayuntamiento y desde aquí invitamos a toda persona interesada a que venga a Isla Cristina este fin de semana y que participe con nosotros en este encuentro completamente abierto y gratuito”.
Recordemos que el Encuentro Nacional de Cetrería y Conservación de Aves de Presa se celebrará durante el sábado y domingo, en el Campo Municipal de Fútbol y el Parque Central y engloba, para el sábado, el VIII Campeonato Andaluz de Bajo Vuelo y que en esta edición incluye la Primera Copa Infantil, lo que a buen seguro atraerá a los aficionados más jóvenes de este deporte.
Así mismo, el domingo, además de las tradicionales exhibiciones de las aves participantes y otras especies como águilas, harris, búhos reales, por nombrar las más llamativas, también se celebra el “VIII Concurso Morfológico de Belleza de Aves de Presa” en el anfiteatro del Parque Central y posterior entrega de trofeos.
Todas las exhibiciones, pruebas y concursos pueden ser seguidos de forma gratuitas, aunque desde la organización se ruega el máximo silencio y compostura durante los vuelos de las aves, con el fin de no alterarlos y que desarrollen a la perfección los ejercicios puntuables.
