El Ciclo ‘Poesía en el Patio’ puesto en marcha pro la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Isla Cristina para acercar este Arte a toda la ciudadanía celebraba anoche el último de sus encuentros para este año 2016.
En esta ocasión era la obra del poeta onubense afincado en Polonia, Miguel Mejías quien tomaba este emblemático espacio donde cada penúltimo jueves de cada mes se dan cita los amantes de la buena literatura.
Como es habitual eran las palabras de bienvenida del Primer Teniente de Alcalde y delegado de Cultura, Francisco González, al que acompañaban el propio autor y José Antonio Martín, coordinador del estos encuentros, las que abrían esta nueva cita con la poesía.
El edil agradecía a todos la asistencia advirtiendo que la noche “prometía” porque como señalaba “hoy en esta mesa hay muchos quilates de poesía y lo mejor está por venir”. Igualmente agradecía su presencia al propio autor a quien acompañaba Francis Vaz, encargado de presentarlo, destacando que “se que ha hecho un verdadero esfuerzo por estar aquí esta noche y permitirnos seguir disfrutando de la palabra ya que, en definitiva, es para lo que celebramos estos encuentros”.
Tras las palabras de Antonio Martín y la presentación de Francis Vaz, el autor desgranaba su obra inundando las paredes del céntrico edificio deleitando a los presentes con los versos de sus distintos trabajos por los que ha cosechado importantes premios.
Cabe recordar que Miguel Mejías se marcha de Huelva con 26 años. Hasta ese momento frecuentaba, con mayor o menor implicación, los lugares literarios activos en la ciudad por aquellos años (Madera Húmeda, 1900, la tertulia de los sábados…). Licenciado en Humanidades, ganó algunos premios de poesía (Gustavo Adolfo Bécquer, Prados Ledesma, Ciudad de Puertollano, Luís Rosales, Eladio Cabañero), entre otros.
En el año 2003 se marcha a Alemania, donde vivió cuatro años. Allí trabajó como profesor de español y se licenció en Filología Hispánica. Fue entonces cuando descubre que quería vivir en el extranjero. En 2007 el trabajo le llevó a Polonia, a Gdańsk, junto al Báltico. Desde entonces reside en esta ciudad donde sigue escribiendo.
En 2012 gana el premio Paul Beckett por ‘Hacia dónde’, libro que reeditó Niebla en 2015. Ya en 2016, aparecieron en ‘La Isla de Siltolá’ una traducción del propio autor de la obra ‘Te Deum’, de Tadeusz Dąbrowski, y un último poemario propio titulado ‘Tierra de nadie’.
