Con el empate cosechado por los caimanes en casa ante el Gibraleón (2-2) se le pone muy cuesta arriba conseguir escalar en la clasificación cuando tan solo quedan cinco jornadas por disputarse y siguen a diez puntos de los puestos de opciones de liguilla a Primera Andaluza.
Un milagro necesita el conjunto isleño para conseguir su objetivo, que matemáticamente aún es posible pero muy complicado dada la igualdad del campeonato y lo fuerte que andan los equipos que ocupan la parte alta de la tabla.
A pesar de haber dominado el choque celebrado en el Emilio de los Santos, los pupilos de Manuel Revidiego, no pudieron doblegar al rival que se adelantó por dos veces en el marcador (8-41).
Los goles de Reda y Jesús (18-55), no fueron suficientes para conseguir los tres puntos en juego a pesar de la insistencia puntera. En los minutos finales el conjunto isleño y el visitante se quedaron con un hombre menos por expulsión.
