Avanza la Sección Oficial de Cortometrajes con la tercera ronda de cortometrajes en competición. Bélgica, Egipto, España y Francia tuvieron su protagonista la noche del martes. Cine de ficción junto al cine documental. Dos caras de una misma moneda cinematográfica. Cine en estado puro.
El cine español abrió la sesión con ‘Casa’ de Alberto Evangelino, donde una estupenda Marta Belenguer se enfrenta a una extraña situación ante la venta de una nueva vivienda. Evangelino nos mantiene en una tensión permanente, dejando al espectador sin poder pestañear ni un solo segundo. El cine belga debuta en esta edición con ‘Ce qui reste’, escrito y dirigido por Hugo Salvaire, una estremecedora historia de madre e hijo resuelta con el talento de un gran cineasta. Desde Francia nos llegaba ‘Champagne’ bajo la batuta de Coraline Lavergne. Una joven visita al ginecólogo para obtener los resultados de un reciente tumor detectado en su pecho. Lo que parece una buena noticia para su médico es muy diferente para ella. La comedia clásica rodada en blanco y negro hizo su aparición bajo el título de ‘Cientouno’, donde Sebastián Alfie nos habla de ciertos miedos de la adolescencia con un cierto aroma al mejor cine de costumbrismo italiano. El cine documental vino son sello egipcio. ‘Coffin Decolleté’ de la mano de Nancy Kamal nos sirve para asistir perplejos a una temible realidad en la que una menor es obligada a casarse con un adulto. Una barbarie que el cine se atreve a denunciar. Y seguimos con el cine en clave social con ‘Desplazado’ de Félix Botello, donde a través de una conversación telefónica presenciamos una terrible realidad social que sufren muchos inmigrantes que han dejado su país para buscarse la vida en el nuestro. Y ese dolor lo capta a la perfección Botello a través del hilo telefónico. La directora Carla Simón, después de ganar el Goya a la Mejor Dirección novel por ‘Verano 1993’ regresa a los cortometrajes con ‘Después también’, una intimista historia con un grave problema como telón de fondo, narrado con el especial encanto con el que Carla nos cuenta sus historias. Un cine hecho para quedarse entre nosotros para siempre. Y cerraba la noche ‘Down to Earth’ una pequeña joya de apenas dos minutos de duración. El director Cesc Nogueras, con guión de Raúl Sánchez, nos muestra una preciosa historia, muy necesaria de contar, que supo poner ese broche final que una buena noche de cine necesita.
