Finaliza la segunda semana de proyecciones con el cuarto pase de Cortometrajes a Concurso. Y a la misma vez que el verano avanza, también lo hace la Sección Oficial, en número de obras y en número de espectadores. Butacas completas llenas de espectadores deseosos de disfrutar del mejor cine bajo la Luna. El orden alfabético de la programación hizo que los ocho cortometrajes exhibidos fuesen todos Made in Spain.
El abrazo
A esta deliciosa comedia disfrazada de drama le tocó abrir el telón. Escrito y dirigido por Iñaki Sánchez Arrieta. Toda la acción se desarrolla en un supermercado. Mientras el protagonista intenta arreglar telefónicamente la relación entre sus hermanos, es observado sigilosamente por una misteriosa mujer. Toni Agustí es el hombre que no deja de hablar por teléfono y Chiqui Fernández es la mujer que lo observa. Ambos están estupendos en sus personajes, pero deberíamos destacar la mirada de Chiqui Fernández. ¡Qué grande es esta actriz y qué bien está en este cortometraje!. El final es mejor no revelarlo, pero es el rizo perfecto para que esta obra sea redonda.
El abrigo verde
Una mujer entrega un abrigo a la beneficiencia y a la semana siguiente se lo ve a la madre del amigo de su hijo a la salida del cole. Con estas herramientas Marcos Cabello nos arma una estupenda película donde la obsesión de la protagonista por su viejo abrigo la lleva a límites insospechados. Contada con la perfección de un reloj, como las mejores comedias, poco a poco nos vamos dejando llevar por su protagonista y su fetiche abrigo verde. El trabajo de Teresa Soria Ruano es impecable, ella consigue que sintamos afecto por ella y que lleguemos incluso a entenderla en su extraña fantasía. Hubo risas cómplices en los espectadores, y eso es el mejor síntoma del trabajo bien hecho.
El baile de los infantes
La única producción documental de la noche nos hizo correr por uno de los encierros de San Fermín, que el orden alfabético de las proyecciones le hizo coincidir con las mismas fiestas de Pamplona. En Pamplona-Iruña, durante todo el año, se espera la llegada del verano y con él, el encierro de San Fermín. Los más pequeños sueñan con correrlo cuando sean mayores. Eso es lo que nos cuentan Jokin Pascual y Javier Dampierre. Y lo hacen con una exquisita elegancia, apoyados en la maravillosa clásica melodía de Dimitri Shostakovich. Todos los personajes se mueven al compás de la música. Una danza. Un ritual. Una emoción. Cine documental en estado puro.
El club de los 27
¡Hoy es un gran día para Roi! Una de las mayores productoras musicales le ha ofrecido tener fama mundial y alcanzar la inmortalidad como estrella pop. Solo hay una condición… debe morir en dos años. Carlos Solano nos trae esta comedia apoyada especialmente en el trabajo actoral de sus dos protagonistas: Luis Zahera y Javier Pereira. Hace ya varias ediciones Luis Zahera recibió en Premio Luna al Mejor Actor en Islantilla. El duelo verbal interpretativo de los dos es excelente. Mientras Zahera habla y se crece a Pereira le toca oír y empequeñecerse. Mano maestra de Solano para llevar a los dos intérpretes a su terreno. Ojo a ese final que hace que esta pequeña pieza tarde en irse de la cabeza.
El marido era fumigador de campos
Esta bella producción andaluza llega bajo el sello de Ana M. Ruiz. El matrimonio de Lena y el fumigador se desmorona, cada uno a su manera intenta buscar una salida que les libere del dolor que sienten. Al final la solución estaba muy cerca. Rodada una cuidadosa dirección de fotografía y de arte. Ana M. Ruiz mima cada detalle, cada plano de su obra. Ese globo que se escapa y se va junto a las nubes es buena prueba de ello. Pero si hay algo que brilla con especial luminosidad son los trabajos de Maite Sandoval y Eduardo Velasco. En sus miradas está el vacío de su matrimonio. Ambos sobresalen en esta triste historia, donde la mirada final entre ambos nos estremece el corazón. Inolvidable.
El trastero
Javier acude a un guardamuebles en un polígono donde sus padres alquilaron un trastero para guardar los muebles de la casa familiar que, tras diez de contrato, caduca. Historia de amor al pasado. Añoranza a los que ya no están. Cine de sentimientos. Gaizka Urresti dirige y escribe esta historia rodada bajo la firma de Altube Filmeak (Pedro Olea y Ohiana Olea). Apoyado en un soberbio, como siempre, Carmelo Gómez. El trabajo de Carmelo es fundamental para hacernos llegar a su corazón y conseguir sentir todas las sensaciones que pasan por su cabeza. Su mirada, sus silencios, sus movimientos. Muy grande Carmelo Gómez. Y es que recordar el pasado también nos hace crecer para el futuro.
Formol 105
Historia de amor y muerte en una asfixiante funeraria del siglo XIX. El turno de la animación llegó de la mano de Martín Rodríguez. Una vez más la animación española volvió a demostrar que es una de las mejores animaciones que existen. El cine español lleva décadas demostrando su talento en la animación, tanto en el fondo como en la forma. Inquietante propuesta de Martín Fernández, un juego de espejos (nunca mejor dicho) donde los personajes se confunden. A destacar esos maravillosos primeros planos, algo que no suele usar la animación, y que en este caso Martín resuelve con maestría y belleza. Genial.
Fritas
Cerró la noche esta producción onubense de la mano de Manuel Gomar. A finales de los setenta, en muchos hogares de España se vivían situaciones terribles que habitualmente se escondían a los demás. También se ocultaban las formas de resolverlas. Gomar su mueve como pez en el agua en el manejo de sus actrices. Unas excelentes María Alfonsa Rosso, Berta Vázquez y sobre todo Elisa Matilla. Ellas son las reinas de la función. Sus diálogos son maravillosos y cómo lo dicen aún más. Pero en toda situación dramática un poco de comedia le viene tan bien como la sal a una buena comida. Y para eso está el personaje del hermano mudo. Todo un hallazgo desde la escritura de guión. Esta historia de vecinas que se ayudan fue todo un broche de oro para cerrar la segunda semana de proyecciones. F: https://islantillacineforum
