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Alcaldes costeros de Huelva, dispuestos ante las nuevas restricciones, pero piden “más financiación”

Alcaldes de la costa de Huelva se han pronunciado este miércoles sobre las nuevas restricciones propuestas por el Comité Regional de Alto Impacto en Salud Pública (comité de expertos) respecto al cierre de las playas de 23,00 a 07,00 horas en aquellos municipios costeros que se encuentren en los niveles 2, 3 y 4 de alerta, exceptuando de esta medida los servicios de restauración ubicados en dichos espacios.

A preguntas de los periodistas, los alcaldes de Isla Cristina y Punta Umbría, Jenaro Orta y Aurora Águedo, respectivamente, han asegurado que están dispuestos a tomar las medidas que correspondan para “cuidar y velar” por la salud de vecinos y visitantes pero “no han recibido dotación presupuestaria” alguna para tomar medidas de refuerzo de vigilancia.

Ambos alcaldes han comparecido junto a la presidenta de la Diputación de Huelva, María Eugenia Limón, y otros alcaldes costeros, en un acto de presentación del Plan de Playas puesto en marcha por la institución provincial.

Por su parte, la presidenta de la Diputación, María Eugenia Limón, ha apuntado que la situación del coronavirus requiere medidas pero ha asegurado que la vigilancia de las playas “recae en los ayuntamientos”, por lo que le ha pedido a la Junta que “haga un guiño” a los consistorios y dé a los alcaldes medidas compensatorias.

En esta misma línea se ha manifestado el alcalde isleño que ha indicado que “ante medidas extraordinarias, financiación extraordinaria”, toda vez que los primeros ediles han recordado el esfuerzo de financiación realizado durante la pandemia por los ayuntamientos para afrontar “competencias que no eran nuestras”.

Asimismo, ambos alcaldes han señalado la amplitud del litoral onubense, indicando Águedo que Punta Umbría tiene 13 kilómetros y 70 puntos de acceso, de manera que la alcaldesa ha apuntado la complejidad de vigilar que no se accede a la playa. No obstante, ambos regidores han asegurado que la Junta les debería “echar una manita” y acompañar las medidas y recomendaciones con financiación.

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