Tomás Concepción pregonó a la Virgen de Mar, Patrona de la Punta del Caimán

La Parroquia de la Virgen del Mar acogió el XI Pregón en honor a la Virgen del Mar, Patrona de la barriada isleña de Punta del Caimán, con motivo de la celebración, la próxima semana, de las fiestas en dedicadas a esta Advocación Mariana, este año muy esperadas por vecinos y visitantes tras el parón de dos años provocado por la Pandemia.

La presentación de la pregonera corrió a cargo de su predecesora, María del Mar Hernández, para después dar paso a un ilusionado Tomás Concepción, isleño, maestro de profesión y afincado en Sevilla, que ofreció una sencilla y emotiva declamación en la que dejó más que patente su amor por la Virgen, a la que lleva componiendo y cantando desde 2010 y por su barriada y cargada de recuerdos y vivencias en torno a estas fiestas marineras.

Entre el numeroso público que llenaba la parroquia estuvieron presentes el alcalde isleño, Jenaro Orta, acompañado por la concejala delegada de Festejos, María del Carmen Beltrán y una amplia representación de la Corporación Municipal. También asistieron, el Rvdo. Párroco Héctor Hugo Vásquez, el Presidente del Consejo de Hermandades, Javier Castro, miembro también de esta Hermandad y el Hermano Mayor Manuel Ramos junto a  toda su Junta de Gobierno, así como los miembros de su Grupo Joven y representantes de las distintas Hermandades de Gloria y Penitencia de la localidad y la presidenta de la Asociación de Vecinos de la Barriada, María Casado.

Una vez terminó el Pregón, Tomás recibió palabras de felicitación del alcalde, del Presidente del Consejo de Hermandades, así como del Hermano Mayor de la Hermandad de la Virgen del Mar. También recibió varios obsequios conmemorativos del momento, entre ellos el pin de plata del Ayuntamiento que le impuso el primer Edil.

Al finalizar el acto, Manuel Ramos, Hermano Mayor, fue el encargado de anunciar el nombre del pregonero del próximo año 2023, encomienda que le ha sido encargada a la isleña Pepa Sosa, quien, presente en el templo, recogía, muy ilusionada, el encargo de declamar a la Virgen del Mar en las fiestas del próximo año.