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Clausurada la Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado que se ha celebrado en Isla Cristina

La Plaza de la Almadraba de la Barriada isleña de la Punta del Caimán, acogía esta mañana la Solemne Eucaristía de Campaña con la que se ponía punto y final a la Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado que ha venido celebrándose en la localidad costera desde el pasado 18 de septiembre.

La Misa, presidida y oficiada por el Obispo de Huelva, Monseñor Santiago Gómez Sierra contó con la presencia de una amplia representación institucional encabezada por el Alcalde, Jenaro Orta. Igualmente asistieron el Delegado Diocesano de Migraciones y Refugiados, Emilio Muñoz, el presidente del Consejo de Hermandades, Javier Castro y representantes de la Hermandades, Asociaciones y Grupos Parroquiales y Religiosos de la localidad y la participación de inmigrantes, agentes pastorales y la ciudadanía del municipio

Una vez finalizó la Eucaristía autoridades Civiles y Eclesiásticas se dirigieron a la Plaza del Emigrante, situada en la misma Barriada, donde se plantó un árbol que servirá como monumento conmemorativo de la celebración de estas Jornadas en la ciudad y más adelante se pondrá un monolito con una placa conmemorativa a los pies de este árbol como recordatorio también de estas jornadas.

Cabe recordar que Isla Cristina ha sido el municipio elegido este año para la celebración de esta jornada organizada por la Diócesis de Huelva bajo el título ‘Hacia un nosotros cada vez más grande’ y en la han participado numerosas asociaciones y colectivos que trabajan con migrantes y refugiados con el objetivo de que se conozca la problemática, las experiencias vividas, las costumbres, la forma de integrarse en una sociedad distinta de la que salieron, así como las asociaciones que hacen posible su integración y colaboran con estas personas, tratando de poner rostro en especial a todas esas personas que, por cualquier motivo se ven obligados a abandonar sus casas, su país o incluso su familia a causa de la política, por color, creencia o sexo y que a día de hoy, son vulnerables, rescatándoles de las listas anónimas de cifras, así como sensibilizar a toda la comunidad que se debe garantizar la conservación de los derechos y la dignidad a todas aquellas personas que se encuentran en este situación.

Han sido unos días intensos con numerosas actividades diocesanas programadas para esta edición, que han ido desde encuentros entre jóvenes, a visitas a asentamientos para conocer la realidad de los migrantes que se encuentran en estos lugares, ponencias y charlas sobre aspectos relacionados con las migraciones o la interculturalidad, diversos talleres artísticos y de cocina, espacios musicales, a presentación del ‘Libro Viajero’ y la exposición, ‘Entrevistas del mundo’ con paneles informativos y testimonios o proyección de documentales.

 

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