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Huelva tiene catalogadas 33 áreas inundables con alto potencial de riesgo

Las lluvias torrenciales, los temporales, las borrascas, los ciclones extra-tropicales y la formación de Depresiones Aisladas en Niveles Altos (DANA) o gota fría son cada vez más habituales debido al cambio climático y calentamiento del mar. La devastación causada por la última borrasca en Huelva, de nombre Bernard, con un millar de árboles tumbados, calles anegadas, barrancos desbordados y cuantiosos daños en las playas y urbanizaciones costeras refrescaron hace un año la certeza histórica de ‘Huelva, ciudad inundable’.

De hecho lo ha sido siempre pero con la sequía parece que se nos había olvidado. Dos borrascas más, Aline y Celine sirvieron años atrás para reafirmar los riesgos que corre la capital  y muchas zonas de la provincia.

Ahora, el paso de la última DANA solo un año después de Bernard nos lo vuelve a recordar, con el agravante en la memoria de la tragedia de Valencia de esta última semana que nos tiene angustiados.

En Huelva, la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía tiene catalogadas más de 33 áreas en riesgo de inundación. Es decir, con un alto potencial de sufrir daños tanto por la crecida de caudales como por la acción del mar. Y a determinados caudales, por ejemplo en el Odiel o el Tinto y sus afluentes hay que añadir el potencial devastador que tendrían las enormes balsas mineras del Andévalo o Riotinto, y embalses de aguas ácidas como el del Sancho en caso de sufrir desbordamientos o roturas.

Daños por las inundaciones en Lepe
Daños por las inundaciones en Lepe

La zona más sensible es la desembocadura del Guadiana entre Isla Cristina y Ayamonte. Aquí, desde hace treinta años, ha habido fuertes conflictos entre los desarrollos turísticos y las zonas inundables. Finalmente, el sector turístico e inmobiliario ha impuesto su modelo de desarrollo y se ha ido ocupando gran parte de la ribera del Guadiana y zonas bajas de La Higuerita, Ayamonte, Lepe o Cartaya. Toda esta zona es un área de alto riesgo.

Finalmente, el sector turístico e inmobiliario ha impuesto su modelo de desarrollo y se ha ido ocupando gran parte de la ribera del Guadiana y zonas bajas de La Higuerita, Ayamonte, Lepe o Cartaya. Toda esta zona es un área de alto riesgo.

En la demarcación hidrográfica del Tinto-Odiel y Piedras (100% andaluza) se han catalogado tres áreas en la desembocadura de los ríos y otra en zona costera propiamente dicha. Se identifican hasta 34 zonas de alto riesgo, 29 hidrológicas y cinco costeras, según los datos de Medio Ambiente.

Alcanzan una longitud cercana a los 200 kilómetros y las zonas de alto riesgo se localizan en Huelva capital, Aljaraque, Gibraleón, Trigueros-San Juan del Puerto, Moguer, Palos, Punta Umbría, Cartaya y Lepe. Y Ayamonte e Isla Cristina, principalmente.

Sobre esta base, la Administración andaluza ha ido implementando estudios para prevenir inundaciones y afrontarlas. El problema es que gran parte de estas zonas catalogadas como inundables han sido urbanizadas y los ayuntamientos no han frenado el crecimiento de construcciones, lo que agrava los riesgos y peligrosidad a los periodos de crecida de caudal en ríos o subidas de la marea en el Atlántico.

Las zonas catalogadas como inundables cuentan con un régimen jurídico propio.

En el caso de la Ley Urbanística de Andalucía se subraya que “pertenecen al suelo no urbanizable los terrenos que el PGOU adscriba a esta clase de suelo por…  presentar riesgos ciertos de … inundaciones u otros riesgos naturales”.

Zona inundada en Huelva
Zona inundada en Huelva

Y la Ley del Suelo y Rehabilitación Urbana remarca, por su parte, que “está en situación de suelo rural…., los que deban quedar sujetos a tal protección conforme a la ordenación territorial y urbanística por los valores en ellos concurrentes,…, así como aquellos con riesgos naturales o tecnológicos, incluidos los de inundación o de otros accidentes graves (mineros), y cuantos otros prevea la legislación de ordenación territorial o urbanística”.

Además, el Plan de Ordenación del Territorio de Andalucía (POTA) concretaba que “la condición de inundable deberá tener reflejo en la clasificación del suelo, normativa y programación del planeamiento urbanístico y territorial, considerando como suelo no urbanizable de especial protección el dominio público natural hidráulico y las zonas de riesgo de inundación en periodo de retorno de 500 años, delimitadas por el órgano competente en la cartografía temática de referencia en su momento”.

Tras evaluar la situación, la normativa autonómica estableció “la necesidad de identificar las zonas con mayor riesgo de inundación, denominadas como Áreas de Riesgo Potencial Significativo de Inundación (ARPSI), de realizar los Mapas de Peligrosidad y Riesgo de Inundación, y los Planes de Gestión de Riesgo de Inundación”.

Muchas zonas de la provincia de Huelva han visto en los últimos años cómo las aguas del mar penetran hasta el casco urbano. Ha pasado de forma recurrente en Huelva capital , en Punta Umbría, Ayamonte e Isla Cristina, con más de 200.000 habitantes. Son ya, a falta de declararlas oficialmente, zonas de alta probabilidad de inundación o de inundación frecuente, que se fija en un periodo de retorno de 50 años.

Demasiados casos como para no tomar en serio los avisos amarillo, naranja o rojo de AEMET, apagar los sistemas de alerta por tsunami o no activar el Sistema Es Alert en Huelva la madrugada del 1 de noviembre de 2024 con Huelva en Aviso Rojo. Una decisión que contrasta mucho habiéndose anunciado su activación en otras provincias el 30 de octubre o este mismo 3 de noviembre en el caso de Almería.

Antes, la borrasca Ophelia llegó en abril de 2017 y después ya se han producido una sucesión de avisos hasta llegar a este último de la DANA casi gemela a la de Valencia.

Demasiados casos como para no tomar en serio los avisos amarillo, naranja o rojo de AEMET, ‘apagar’ los sistemas de alerta por tsunami (caso de Huelva capital) o no activar el Sistema Es Alert en Huelva la madrugada del 1 de noviembre de 2024 con Huelva en Aviso Rojo. Una decisión que contrasta mucho habiéndose anunciado su activación en otras provincias el 30 de octubre o este mismo 3 de noviembre en el caso de Almería. diariodehuelva.es

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