Animación, documental y ficción cerraron la cuarta semana de proyecciones de la Sección Oficial de Cortometrajes. De nuevo un variado cocktail de nacionalidades en competición. Andorra, Canadá, Francia, España y Nepal se midieron las caras en la noche del jueves. ¿Quién da más?
Kike Maíllo, después de dos largometrajes a sus espaldas regresa al formato pequeño con “La octava dimensión” al servicio de una magnífica Najwa Nimri, que brilla con luz propia en este rompecabezas audiovisual que solo el espectador más avispado puede descifrar. Una joyita. El cine social contado en clave de comedia llegaba con “La tercera parte” de Alicia Albares y Paco Cavero. Luis Bermejo capitanea esta tierna historia contada con un gran sensibilidad que emocionó a todos los presentes. La animación de Ricardo Ramón hizo disfrutar con “Las aventuras del joven Félix”. El amor a los animales de un niño que en el futuro se convertirá en todo un referente para varias generaciones. Todo un acierto. El primer documental de la noche era “Las sinsombrero” dirigido a tres manos por Tania Balló, Serrana Torres y Manuel Jiménez. Una historia que tenía que ser contada. Hay que conocer el pasado para entender el futuro. Una excelente película. Canadá también tuvo su protagonismo con “Lay them straight” de Robert Deleskie. Una adolescente que lucha contra el trastorno obsesivo compulsivo tiene que enfrentarse a los matones escolares todos los días. Disparo directo a la conciencia del espectador. Por primera vez compite Andorra en Festival con “Le Blizzard” de Álvar Rodríguez Areny. Una huida contada con un excelente pulso para mantener al espectador sin pestañear de principio a fin. La comedia por excelencia tiene acento francés y “Le Graffiti” de Aurélien Laplace es un magnífico ejemplo de ello. Dos personajes al límite con una divertidísima historia como telón de fondo. El segundo documental de la noche procedía de Nepal, “Madariyeko Nilo Dhurwan” de Niranjan Raj Bhewal no habla de una sociedad sigue segregada por el sistema de castas y creencias. Y lo hace con sumo talento apoyado en la preciosa fotografía de Sharad Mahato. Y cerró la semana “Mama” de Eduardo Vieteiz. El verdadero relato de Rabah, una adorable niña siria, con una vida estupenda, rodeada de una maravillosa familia y la increíble historia que hace que acabe completamente sola. Una excelente propuesta como broche final.
